El líder de la Asociación de Empleados Fiscales e Ingresos Públicos, Pablo Flores, remarcó la falta de un programa político en el oficialismo, a su vez mencionó que la reconstrucción del peronismo tiene que llegar de la mano de una propuesta que genere esperanzas de un cambio real. También habló del rol de la CGT y de la representación como la mayor virtud del dirigente.
El movimiento obrero organizado es el único actor social en manifestarse ¿Qué rol sentís que está teniendo la CGT?
El movimiento obrero viene teniendo una estrategia propia sin acompañamiento de la política. Hay que asumir las responsabilidades que tenemos, y ante el ajuste del gobierno se dio una estrategia judicial que acompañó a una estrategia de movilización en las calles. Hoy existen paros sectoriales según las distintas problemáticas y estamos evaluando concluir en una medida general. El paro se hizo para acompañar a quienes tenían que votar la Ley Bases…
Se invisibiliza ese hecho en la gran mayoría de medios, y sólo se apunta a cuestiones internas de los libertarios…
Hicimos lo que teníamos que hacer y lo propio hicieron algunos diputados. Obviamente lo demás lo hizo la desinteligencia del oficialismo. Nosotros entendemos que lo nuestro es una reacción contra los ajustes, pero la agenda la agiliza el propio gobierno que comienza a pelearse con sus aliados. Eso ocurre porque no tienen programa de gobierno, y todo se concentra en el ministerio de Economía o en el de Capital Humano.
Yendo puntualmente a las desinteligencias del gobierno puedo notar que a pesar de las políticas contrarias al pueblo, hasta el día de hoy gozan de un gran apoyo popular. ¿Cómo se explica eso?
Porque el Presidente que tenemos es el fracaso de nuestro gobierno. Y claro, también de la otra fuerza opositora que terminó saliendo tercera. Que los libertarios esten ocupando un rol central es el resultado de que la gente se canso de la no política, de la falta de respuestas. Ante este panorama queda dos puntos de vista: quienes creen que la solución llega de la mano de que este Gobierno tiene más errores que nosotros, y quienes pensamos que la forma de reconstruirse es mediante formar una alternativa seria, que genere esperanzas de un cambio real.
¿Ese cambio llegará de un recambio generacional? Puntualmente en algunos gremios sucede y sos una muestra de ello.
Inevitablemente, ya sea desde lo biológico hasta lo que uno busca políticamente eso está pasando. Hay compañeros que quizá ya no están viendo la totalidad del cambio en la sociedad, pero también quiero remarcar que sin su experiencia no podemos tener la fortaleza necesaria para un momento como este. Acá todos sumamos. Todos los lugares se conquistan, nadie te tiene que regalar nada y el hecho de ser joven no es una virtud. Lo virtuoso es ser representativo.
Antes un sindicato tenía paritarias anuales, después semestrales, y así se fueron achicando en el tiempo. ¿Hoy cómo se puede planificar esto?
Es el día a día, uno planifica pero la realidad puede frenarte en cualquier momento. Lo que no podemos hacer es estancarnos. Lamentablemente hoy es una especulación diaria, y esto le sucede a todos. Uno puede tener una lectura de cómo se da la realidad, pero hace tiempo que no veo tanta desorientación en el ámbito político. La pelea del Gobierno central con los gobernadores…
Existe un poder discursivo en eso, Milei públicamente ironizaba a Nacho Torres pero en los hechos le realizó giros a Chubut…
El gobierno construye un falso sentido común y distorsiona lo que dice con lo que hace. No comparto que el Presidente sea intelectualmente honesto como algunos dicen, quizá cree más en lo que hace que en lo que dice.
Termina siendo algo frecuente el hecho de elegir un enemigo, como lo es Nacho Torres, antes fue Lali Espósito, y sigue la lista. ¿Cree que termina siendo algo ventajoso para el oficialismo?
No le es ventajoso porque no sacó ninguna Ley en un momento en el que tenía todo dado para hacerlo. Después hizo un falso relato de que fue para atrás con la iniciativa que mandó al Congreso para demostrar quienes eran verdaderamente “la casta”, parece infantil ese enunciado. Decir que dentro de dos meses propone un pacto pero le tienen que aprobar todo a libro cerrado es insistir en su discurso. Es de una falta de solidez intelectual importante, pero está a la vista que al menos por ahora tiene resultados en el impacto social. Creo que ese resultado es más producto de nuestro fracaso que de sus éxitos.