Choque de trenes Palermo: denuncian un “deterioro programado” para “legitimar el discurso privatizador”

Un tren con pasajeros del ferrocarril San Martín que se aproximaba a la estación Palermo proveniente de Retiro, chocó en la mañana del viernes con una locomotora vacía que se desplazaba en el mismo sentido y sobre la misma vía, un hecho que dejó un saldo de 60 personas heridas. 

“Una formación -con siete coches- de la línea San Martín colisionó con una locomotora y un coche furgón vacío, a las 10:31, en el kilómetro 4.900 – a la altura de la avenida Alcorta-, sobre el viaducto Palermo”, informó por la mañana la empresa Trenes Argentinos.

El choque producido “por causas que son motivo de investigación”, ocasionó tanto el descarrilamiento tanto “del furgón de la formación vacía y su locomotora”, como “del primer coche del tren de pasajeros”.

La evacuación del tren de pasajeros resultó dificultosa por el lugar en el que se produjo la colisión, haciéndose necesario el corte de alambrados

En tanto, desde el ministerio de Salud porteño informaron que el Same atendió a 90 personas en el lugar mientras que 53 fueron trasladas a 14 diferentes centros asistenciales de la Ciudad tras activarse “una alerta roja en todos los hospitales generales de agudos y alerta amarilla en los hospitales especializados”.

En todos los casos, se trató de pasajeros con “politraumatismos” que se encuentran “fuera de peligro”

En tanto, los sindicatos denunciaron que este siniestro es consecuencia de un “desfinanciamiento” y “deterioro programado” para “legitimar el discurso privatizador” del Gobierno sobre el sistema ferroviario.

“Lamentablemente, en ese sector se está trabajando con un sistema de señalamiento que no funciona, con los semáforos de las señales siempre en rojo o apagadas, lo que quiere decir que no hay ningún sistema de seguridad para que los trenes corran con vía libre garantizada, más que una autorización escrita desde una estación hasta la siguiente cabina”, señaló a Somos Télam Alejandro Alvite, maquinista desde hace 27 años en la línea San Martín.

El conductor explicó que “en este caso, lo que ocurrió es que se dio la autorización para que circule una locomotora con furgones vacíos” desde la estación Retiro, pero “antes que (la formación) llegue a Palermo, se largó de atrás a un tren de pasajeros con la misma autorización asegurándoLe que no había nada” por delante.

“El tren (de pasajeros) fue confiado de que no había nada hasta Palermo, pero en la última curva se encontró con la locomotora parada ahí con el furgón, y los impactó directamente”, contó.

El trabajador ferroviario aseguró que “lamentablemente esto sucede en varios puntos de la línea e implica que uno va a trabajando casi al tanteo”, con todo el riesgo que esto conlleva para los pasajeros y el material rodante. 

“Si las señales estuvieran bien, nunca un tren puede acercarse al otro a menos de 400 metros como mínimo. Parece que se buscara que este tipo de cosas sucedieran, a partir del desfinanciamiento, pero también con un dejar hacer”, afirmó Alvite.

Y en ese sentido, remarcó: “Si bien la desinversión en ferrocarriles no es una novedad, en esta gestión, lo que se hace evidente es la aceleración en el deterioro del servicio y el corte abrupto de la inyección de fondos de cualquier tipo. Ni siquiera hay fondos para los gastos mínimos de mantenimiento. Hubo días en que no había combustible para las locomotoras”.

En la misma línea, explicó que “de las 24 locomotoras y 22 formaciones que llegaron a la línea San Martín” durante la renovación que se produjo en el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, “solamente quedan circulando la mitad” por la falta de mantenimiento y de repuestos –lo que obliga a desarmar algunas unidades para arreglar otras-, lo que impacta directamente en la frecuencia.

En ese sentido, Alejandro contó que el momento actual se caracteriza por un “deterioro programado que permite legitimar el discurso privatizador, como si la masacre de Once no hubiera sucedido durante la gestión privada”.

“La solución no es privatizar, sino invertir y los recursos para esa inversión tiene que venir del transporte de cargas que deberían financiar al sistema de pasajeros, para eso habría que terminar con las concesionarias que siguen explotando el transporte de carga en la Argentina”, sostuvo.

En tanto, el secretario general de la Fraternidad, Oscar Maturano, aseguró que el accidente ferroviario fue por “ausencia de mantenimiento”.

“Hace diez días que venimos trabajando así porque se roban los cables de señalamiento”, señaló, y dijo que su sindicato lleva el mismo tiempo “reclamando que se reparen pero no había material de repuesto” para hacerlo.

Maturano señaló a “la ausencia de mantenimiento en la actividad, lo que degrada la seguridad del sistema” a los motivos que desencadenaron el accidente, ya que “el robo de cables que proveen de energía a los semáforos y señales que organizan el tráfico ferroviario es cada vez más frecuente en todas las líneas”.

En ese sentido, ejemplificó que la baja de material rodante en circulación es tal que los días de semana “estamos corriendo como días sábados, y el sábado, como si fuera domingo” porque “tenemos 60 locomotoras paradas y 150 coches eléctricos desmantelados porque se les sacan los repuestos para que siga funcionando otro”.

“Nos están llevando a esto para que venga un capital privado y compre la empresa a un menor valor. No estamos a favor de la privatización, pero sí de que el capital privado ponga plata y, si se tiene que concesionar, que se concesione, pero que pongan plata en infraestructura y los trenes funcionen como deben con los empleados que deben”, afirmó.

Por su parte, la delegada de la Unión Ferroviaria (UF) en el Ferrocarril Sarmiento, Mónica Schlotthauer, discrepó con quienes “le están echando la culpa al auxiliar o a los chorros” porque “el verdadero problema es la falta de inversión que hace que estén con un sistema muy precario de señalamiento y que el ferrocarril tenga casi 60 locomotora paradas”.

“Nosotros tuvimos este año 435 descarrilamientos en los trenes en Argentina, quiere decir que es un sistema que se está viniendo abajo”, subrayó a Somos Telam

“Lo atribuimos a la desidia y la desinversión porque acá no les interesa los ferrocarriles de pasajeros sino sólo el ferrocarril que tenga que ver con las transnacionales que se llevan el petróleo, el litio y la soja”, observó.

Y si bien puntualizó que “hace décadas que hay vaciamiento”, los problemas que sucedan como consecuencia de esto –como la colisión de este viernes-, “seguramente los van a usar para decir que hay que privatizar”.

“Pero eso no va a ser la solución porque acá el tema es la inversión y los privados no vienen a invertir, sino a quedarse con los subsidios del Estado como ya vimos que lo hicieron antes”, concluyó.