El flagelo de la desnutrición en la ciudad más rica de la Argentina.

El relevamiento realizado en diez barrios porteños muestra que “el gobierno porteño no está complementando en comedores escolares y comunitarios los nutrientes que los pibes necesitan” denunció la legisladora Laura Velasco.

El estudio arrojó que el 54,6% de los barrios populares sufre el flagelo de la malnutrición en primeras infancias y aumenta al 61% entre chicos y chicas de entre 6 y 10 años malnutridos en la ciudad más rica.

En la Legislatura porteña la diputada presentó esa investigación que llevó adelante la Universidad Popular de Barrios de Pie.

“Lo que dice el relevamiento realmente es muy grave, el 88% de las familias está recibiendo un aporte proteico, menor de lo recomendado, que tiene una reducción del consumo de carne y huevos, en verduras, frutas y en lácteos.

Por otra parte, las familias también han ido disminuyendo el volumen de las porciones e inclusive saltando comidas. El dato que también es altamente preocupante es que uno de cada tres niños, niñas y adolescentes de estos barrios hoy están saltando una de las cuatro comidas”, indicó la legisladora.

Otro de los datos es que el 61% por ciento de los niños en la edad escolar primaria tiene malnutrición mayormente en sobrepeso, obesidad, pero todo esto está afectando concretamente lo que es el desarrollo del crecimiento adecuado de la niñez, inclusive genera problemáticas en el aprendizaje escolar e implica contraer enfermedades crónicas de la infancia como diabetes, hipertensión, enfermedades renales, cardiopatías. Lo cual es doblemente grave porque la Ciudad de Buenos Aires tiene un presupuesto de dos billones de pesos.

“Tenemos la problemática también de que los comedores escolares como es de público conocimiento siguen licitando con empresas que están denunciadas por baja calidad. Sin ir más lejos al fin del año pasado tuvimos un conflicto por la cantidad y calidad de las viandas que no estaban dando respuesta a las necesidades alimentarias de los adolescentes”, dijo Velasco.

¿Qué solución política se puede dar con esta investigación?

Lo primero es visibilizar el tema, este informe se viene haciendo desde hace quince años y toma técnicas de antropometría, que atiende a recomendaciones del Ministerio de Salud de la nación y la Sociedad Argentina de Pediatría. Lo segundo es que lo vamos a hacer llegar a las autoridades del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para que tomen cartas en el asunto, y por supuesto vamos a trabajar también desde la Comisión en de Políticas de promoción e integración social que me toca presidir en la Legislatura con distintas entidades que tienen que ver con la niñez, con la salud, con distintos organismos y organizaciones que pueden acompañarnos a trabajar porque esta realidad es muy urgente de atender.