Juntos por el vaciamiento de la Cultura

Un informe publicado por la Auditoría General de la Ciudad de Buenos Aires, deja en evidencia deficiencias en la ejecución presupuestaria en materia de infraestructura del Instituto Vocacional de Arte “Manuel José de Labardén”, el Instituto de Investigaciones en Etnomusicología, la Orquesta Emilio Balcarce y las Orquestas Juveniles, todas dependientes de la Dirección General de Enseñanza Artística del Ministerio de Cultura de la Ciudad.

Al comentarlo, el Auditor General Lisandro Teszkiewicz sostuvo que “Otra vez notamos en la gestión de Horacio Rodriguez Larreta el desaliento y la desinversión en el sector educativo, y en este caso particular relacionado a la formación en disciplinas artísticas.”

En el mencionado informe se puede notar que de DOS MILLONES CINCUENTA MIL PESOS ($2.050.000) presupuestados para “Puesta en Valor de Institutos y Organismos de Enseñanza Artística”, sólo se destinaron CINCO MIL QUINIENTOS PESOS ($5.500) para el mantenimiento edilicio previsto en la descripción del programa y, no se realizaron las intervenciones planificadas.

Resulta relevante que presupuesto de infraestructura fue reforzado desde el 2016 a fines de garantizar la correcta ejecución del plan de inversión, por lo que el auditor del peronismo porteño resalta que “es bien sabido que la mirada del gobierno de Larreta está puesta en todo aquello que pueda generar un negocio, y es evidente que para él y Enrique Avogrado, la formación artística no entra en esa perspectiva, pero lo que resulta llamativo es que no se ejecute el plan de inversión mientras se incrementa el presupuesto”.

En el mismo sentido, el informe revela una obra realizada en el Instituto Vocacional de Arte “Manuel José de Labardén”, de demolición y construcción de un muro medianero, que no solo estaba imputada en otra actividad presupuestaria sino que sin haber cumplido el contratista con lo encomendado se pagó el total de lo previsto. “No solo quedan sin resolver problemas de infraestructura como humedad en paredes y cimientos, sino también problemas eléctricos, de seguridad contra incendios y de acceso a personas con movilidad reducida. Esto último denota el peligro al que Rodriguez Larreta y Avogrado expone a los y las estudiantes y la discriminación que ejerce sobre los sectores de la ciudadanía que eligen la formacion artistica publica”, agregó Teszkiewicz.

En consonancia a esto es que los y las porteñas llevan reclamando que se cumpla con la Ley n° 962 “Accesibilidad física para todos”, que este año modificó el Código de la Edificación de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la cual implica la colocación de rampas y/o mecanismos que faciliten el acceso a personas con movilidad reducida. “Sin embargo, no es necesario destacar que la mayoría de los edificios de la Ciudad no cuentan con ello, por lo que queda una vez más en evidencia la política de marketing vacío de contenido que lleva adelante el Gobierno de la Ciudad” sentencia el auditor.