CADA VEZ MÁS LEJOS DEL RÍO

La Legislatura porteña debatió este jueves y aprobó en “primera lectura” un convenio urbanístico entre el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y una empresa constructora, destinado a convertir la ex Ciudad Deportiva de Boca Juniors, en torres de lujo, edificaciones comerciales, y un parque público.

Se trata de unas 70 manzanas hoy ociosas que incluyen humedales y espejos de agua, en un polígono delimitado por la Avenida España, el canal fluvial contiguo al barrio Rodrigo Bueno y la ribera del Río de la Plata. Para poder avanzar en el plan denominado “Parque Público y Urbanización Costa Urbana”, se requiere que la Legislatura de la CABA apruebe el convenio entre la Jefatura de Gobierno y la firma IRSA S.A. y disponga las rezonificaciones correspondientes.

Lo aprobado por los diputados capitalinos se basó en un proyecto del Poder Ejecutivo que obtuvo despacho conjunto de las comisiones de Planeamiento Urbano y de Presupuesto. La presidenta de Protección y Uso del Espacio Público, Claudia Neira (FdT), hizo una observación al considerar que el asunto debió haber sido girado a su comisión dado que no se desarrollaron los estudios pertinentes del suelo.

Daniel del Sol (VJ), miembro informante durante el debate, dijo que antes de la sanción definitiva del proyecto se tomarán en cuenta todas las propuestas de modificación que se planteen tanto en la Audiencia Pública como en las reuniones de las comisiones asesoras legislativas. Por tratarse de un expediente que requiere “doble lectura”, se prevé otro debate y votación, después de la Audiencia Pública.

En la Audiencia Pública que se realizó luego de la aprobación de la rezonificación de Costa Salguero y Punta Carrasco, el 97 por ciento de los vecinos que participaron le dieron la espalda al proyecto.

Se espera que vuelva a suceder algo similar.

El gran predio en cuestión era originalmente del Estado nacional y en 1964 fue cedido al Club Boca Juniors para un emprendimiento que quedó inconcluso y abandonado. Los terrenos fueron luego vendidos a particulares y quedaron en jurisdicción de la ahora Ciudad Autónoma.

El plan propuesto contempla destinar un 67% de la superficie a espacio de uso público, con la preservación de espejos de agua y humedales, y el resto sería destinado a un desarrollo urbanístico de conjunto residencial, viviendas colectivas, comercios, servicios, establecimientos de educación y salud.

La aprobación en primera lectura fue por 37 votos positivos de VJ, UCR y PS, con 20 votos negativos del FdT y la izquierda.