BERA: “MILITAR CULTURA PARA LA COMUNIDAD”

Las aperturas permiten aumentar el aforo en los teatros, de esto y de la actualidad de una sala tan comprometida con la cultura nacional y la comunidad habló en esta nota Lisandro Bera, el director de la Uocra Cultura y programador de la sala de 260 localidades que tiene el gremio (Rawson 42, CABA). 

El coronavirus motivó el cierre de muchos teatros comerciales, ¿Cómo impactó en una sala que responde a una organización gremial?

La pandemia fue un baldazo de agua fría. Con retrospectiva puedo decir que no fue compleja la decisión porque no había margen de acción: teníamos que cerrar. Nosotros filmamos a dos cámaras todas las funciones que pasaron por nuestra sala, cuando sucedió la pandemia decidimos subir ese material a internet. Te diría que como un acto militante con la cultura para mantener todo el trabajo hecho por años fue que los cargamos en Youtube a la misma hora en que se realizan las obras (viernes y sábados 20.30hs y domingos 15 hs), para emular la costumbre de venir físicamente. Me llamó la atención el promedio de espectadores, muy similar al que teníamos acá (entre 150 y 200 personas), estoy seguro que no es la misma gente que venía de manera presencial.

¿La idea siempre fue seguir?

Esto fue una decisión política y social de la UOCRA: hacer un teatro y difundir la cultura argentina. Eso no varió en el contexto pandémico, lo que celebro y agradezco. Se sostuvo desde la entidad, y la Fundación UOCRA, que teníamos que volver más que nunca porque la gente lo necesita, ya no tiene un mango, y a su vez es una fuente de laburo para los artistas que tan mal la pasaron. Para los afiliados la entrada es gratuita, y el valor para el público general es de 80 pesos que se usa para pagar derechos de autor (ARGENTORES, SADAIC, AADI, CAPIF, según el caso).

Llegó el regreso en julio…

Las primeras funciones tuvieron una emoción increíble. El reencuentro de los artistas con el público, los espectadores que volvían a ver un show en vivo, nosotros a recepcionarlos. Por suerte, tuvimos una respuesta impecable ante las nuevas restricciones. Si bien este teatro pertenece a la UOCRA tras un trabajo de 15 años ya pertenece a la comunidad, es un espacio que había que recuperar para el público y no únicamente para una organización.

¿Qué criterio usas para elegir las obras? 

A esta altura el trabajo es más sencillo porque es una sala consolidada, donde tenemos espectadores que vienen a veces sin saber qué obra está en cartelera porque confía que lo que van a ver acá será de calidad. Si veo una joya del teatro off lo traigo porque es una posibilidad de que el público vea algo distinto, y del artista poder trabajar con tranquilidad sin tener que pensar en la recaudación.

¿Cuáles son los objetivos a futuro?

Recuperar y amplificar nuestras actividades. Este año crecimos y abrimos un espacio de Formación Profesional en Industrias Culturales, dictamos cursos para operar sonido en vivo, operar iluminación en vivo y para auxiliar de escenografía. Son de manera gratuita y con vacantes limitadas, ya dimos la parte teórica de los cursos de manera virtual y ahora con menos restricciones daremos en manera presencial la parte práctica en la sala. La idea es que puedan hacer pasantías en este teatro, y que tengan una salida laboral que les permita trabajar en cualquier acto público del país. Existe el proyecto de ampliar a vestuario, maquillaje, y producción. Este es el primer año que lo hacemos y renovamos nuestro interés en formar trabajadores, fuentes de laburo, generando oportunidades de manera gratuita.